Esta iniciativa busca que los empleados de oficina conozcan la importante labor del personal de reparto, viviéndola en primera persona y acercándose a destinatarios y clientes.
GLS Spain celebra el Driver Day como una iniciativa de carácter interno que la compañía de logística y transporte realiza mensualmente con la participación de sus empleados.
Durante el último lunes de cada mes, el personal de oficina de GLS Spain cambia su escritorio de trabajo por una furgoneta para vivir de primera mano las tareas y desafíos a los que se enfrenta diariamente el personal de reparto.
Esta acción se llevó a cabo por primera vez en 2014 bajo el nombre de “Día del Mensajero”, que pasó a llamarse Driver Day tras la compra de ASM-Redyser por parte de la empresa de paquetería GLS, internacionalizando así el concepto de la actividad.
Tras siete años, más de 400 participantes y 40 ediciones a sus espaldas, el Driver Day es un ejercicio de empatía que trata de poner en valor la imprescindible y valiosa labor que realiza el personal de reparto.
Asimismo, busca que los trabajadores de oficina puedan aprender de los retos cotidianos con los que conviven los mensajeros, fomentar la comunicación interna y el intercambio recíproco de experiencia, detectar oportunidades de mejora y tener un contacto directo con el cliente final.
“Una iniciativa como esta ayuda a que los empleados y personal de GLS tengan la oportunidad de aprender unos de otros. Es un ejercicio que resulta muy enriquecedor, no solo para los participantes porque amplía su conocimiento y conciencia sobre otras áreas, sino también para la empresa, pues permite identificar necesidades y puntos de mejora que pueden ayudar a mejorar la calidad de nuestros servicios”
Luis Doncel, General Manager Iberia de GLS Spain